
A los ingenieros agrónomos muchas veces nos hacen burla respecto a que ante una pregunta concreta nuestra primera respuesta es…depende. Depende del clima, depende de la biología, depende del tipo de cambio, depende del tipo de campo, depende, depende, depende. Como suele ocurrir en estos casos, en esta “cargada amistosa” hay mucho de exageración y algo de cierto. Lo bueno es que ahora no estamos solos. Nos acompañan alegremente analistas políticos y economistas.